«¿Quiere contratar un seguro extra por robo? Tenga en cuenta que en las regiones de Apulia, Basilicata y Campania los robos de coche son algo muy común.»
Bendita y lapidaria frase para comenzar un roadtrip por el sur de Italia. Estas mismas palabras me espetaron en la oficina de Dollar Thrift del aeropuerto de Bari. Recién aterrizado. Y es que, si hay un lugar en Europa donde conducir sea una aventura de principio a fin, ese es el Mezzogiorno italiano. Eso sí, no desesperes, conducir por el sur de Italia es difícil, pero no imposible.
Quisiera comenzar incidiendo en el hecho de que si te gusta conducir, las regiones meridionales de Italia te ofrecen tanto carreteras de paisajes espectaculares con acantilados, desfiladeros, macizos montañosos, como pequeños y pintorescos pueblecitos a los que al paso de tu motor de forastero, se asomarán las nonnas a los quicios de sus puertas. Es además una manera ideal de descubrir a tu ritmo un área en la que los principales atractivos turísticos no se encuentran en grandes núcleos de población como en el norte del país. Aquí el encanto está en el ir parando de aldea en aldea para descubrir el rico patrimonio local.
Pero antes de arrancar, permíteme una serie de consejos.
En este post encontrarás:
Robos

Llega un punto en la vida del viajero en el que nunca se sabe si los seguros extra que te ofrecen las compañías de alquiler de automóviles son una simple excusa para sacar más dinero o se trata de verdaderos peligros que te acechan. En este caso, meterme miedo, me lo metieron, pero no lo suficiente. Así que me arriesgué y me fui a descubrir el sur de la bota sin seguro extra de robo alguno y nada ocurrió. Pero lo cortés no quita lo valiente y es necesario ser precavido. Pregunta en el alojamiento donde vayas a dormir en la ciudad de turno si es seguro aparcar en la zona. Echa mano también de tu instinto: asegúrate de que, donde aparques tu coche, este no llame excesivamente la atención. Por esta razón, intenta no alquilar automóviles de lujo o demasiado llamativos porque recuerda: en esta tierra, Fiat (y no Ferrari) es quien manda en las calles. No te dejes tampoco las perlas a la vista, nadie tiene que saber que eres la más rica del lugar. Sé discreto y no estarás expuesto a más riesgo de robo que en cualquier otra parte del mundo.
En carretera abierta

Las carreteras en el sur de Italia tienen un mantenimiento algo deficiente -no mucho peor que en España hoy en día, la verdad sea dicha- y los italianos conducen por lo general rápido. Presta atención a los adelantamientos ya que, si el espacio lo permite, por pequeño que sea, no dudarán en rebasarte a pocos centímetros mientras se aproxima otro coche en dirección contraria. Si esto ocurre, apártate un poco a la derecha para facilitar el adelantamiento y evitar percances.
Autopistas

En Italia existen dos tipos de vías de alta capacidad: las strade statali y las autostrade. Las primeras son simplemente carreteras desdobladas, algo parecidas a las autovías de primera generación, con cruces a nivel, velocidad máxima reducida, etc. Los carteles de señalización son azules y por lo general soportan bastante tráfico. Las autostrade serían el equivalente a las autopistas: son de pago, su trazado es más recto y cuentan con menos tráfico. No obstante, en la mayoría de los casos su mantenimiento y su antigüedad (recuerda que el sistema de autopistas italianos fue el segundo de toda Europa tras el alemán), hacen que puedas llevarte algún susto. Sus carteles indicativos son en verde así que cuando veas un letrero en ese color: prepara la cartera.
Costa amalfitana

El día que recorrí en coche la Costa amalfitana cumplí uno de mis sueños como conductor: esta pequeña franja de costa escarpada al sur de la Campania es la quintaesencia del roadtrip italiano. En futuros posts le dedicaré la atención que se merece, pero por ahora, centrémonos en la conducción.
Las vistas son increíbles y el azul del agua refresca con solo mirarlo desde las alturas, pero hay que prestar cien ojos a la carretera. La SS163 que recorre toda la costa desde Salerno hasta Sorrento es de doble sentido. Que no te engañe: debería ser de uno. Estrecha y serpenteante, tras cada curva te puede esperar de frente un autobús cargado de turistas o un pullman llevando a la población local al pueblo vecino. Esta dificultad topográfica no hace que los amalfitanos disminuyan su velocidad por lo que deberás ser tú el que tenga que estar el doble de pendiente de la carretera. Para tu ayuda, cuentas con espejos colocados en curvas muy cerradas con el objetivo de que puedas prever lo que te viene de frente. El tráfico es además intenso, por lo que si puedes evitar los meses de verano para recorrer la Costa de Amalfi en temporada alta, lo disfrutarás más. Primavera u otoño son también buenas -incluso mejores- épocas para admirar el azul turquesa de sus playas y la fina arquitectura de sus pueblecitos.
El mayor reto de conducir por el sur de Italia: Nápoles

El caos armónico. No podría definir la conducción en la capital de la Campania de otra manera. La primera sensación que produce al volante entrar en la urbe napolitana es casi paralizante: vespas sobrepasándote a izquierda, derecha, adelante y atrás; rotondas en las que parece que no podrás entrar y de las que, una vez dentro, parece que no podrás salir; cláxones ensordecedores por toda la ciudad; peatones saltando a la calzada de la nada, etcétera, etcétera. Un panorama que se presta poco acogedor al volante del conductor foráneo, pero ante esta situación: relájate, respira y continúa tu camino sin prisa pero sin pausa. El tráfico en Nápoles sigue un bello y -para el ojo extraño- incomprensible ritmo en el que nadie choca; en el que probablemente tú, como foráneo, seas más peligroso que ellos. El truco está en ir despacio. Fíjate: conducen caótica pero lentamente. Intenta ir a la misma velocidad que ellos, con tranquilidad pero sin pararse. Hazme caso: un par de horas conduciendo por Nápoles y te convertirás en todo un conductor del lugar. Busca aparcamiento y vete a disfrutar de un buen trozo de pizza napolitana.
No te eches para atrás: al contrario, ¡arranca y buen viaje!

Tras todo un artículo cargado de términos como precaución, cuidado, atención o caótico entendería el hecho de que te entraran dudas a la hora de alquilarte un coche por el sur de Italia. Pero nada más lejos de mi intención. El sur de Italia es un lugar fascinante para conducir. Como describí al principio, en pocas regiones de Europa podrás descubrir más encantos viajando en coche que en el Mezzogiorno y en escasos rincones del viejo continente admirarás mejores paisajes al volante. Así que ya sabes. Arranca el coche y a disfrutar de la conducción. Por cierto, no se te olvide encender la radio. ¿Mi recomendación? Sintoniza Radio Italia «Solo música italiana». Si viajar se compone de experiencias, ¿qué mejor que escuchar los grandes éxitos de una potencia musical como son nuestros vecinos del Mediterráneo mientras recorres sus campos de olivos? Lasciate mi cantare.
Comments
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Estamos trabajando en un mini documental de las particularidades de la conducción intuitiva «se que me has visto y entiendo que te he visto» en Puglia… interesante! 😉
😀 me alegro de que os haya gustado. Si queréis saber más sobre el tema no dudéis en preguntar. Un saludo
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