Mis 10 mejores experiencias viajeras en 2019

El último año de la década ha sido -sin dudarlo- el más viajero de mi vida. Tanto por motivos personales como por laborales, ha sido el año en el que más países he visitado. Un total de trece países por los que este mapache ha paseado su tipín. El 2019 puede resumirse en el año de la gastronomía, he disfrutado de la cocina de los mejores países del mundo. De hecho podría haber hecho un TOP 10 sólo de platos que he devorado. También el año de los PIGS, ya que he visitado los cuatro países que esconden estas siglas y que en realidad son la envidia de los que nos pusieron tan porcino apodo.

En este año se acaba una década y siempre, siempre, lo recordaré con una amplia sonrisa. Me ha costado, pero en este post, te voy a resumir mis 10 mejores experiencias en este año que termina. Espero que te gusten.

10. Quedarme boquiabierto con las casas colgadas de Cuenca

cuenca

Tenía delito que teniendo Cuenca tan cerca nunca hubiera visitado esta ciudad Patrimonio Mundial de Castilla-La Mancha. De la mano de InterMundial y sus Jornadas de Turismo Sostenible tuve la oportunidad de conocer a fondo Cuenca y uno de sus rincones icónicos: las casas colgadas. Tienen su fama bien merecida ya que pueden considerarse uno de los primeros rascacielos de España. Uno de los rincones más icónicos de nuestro país.

Pero no sólo las casas colgadas, el patrimonio de Cuenca va mucho más allá: el puente de San Pedro, la catedral, el casco histórico, el castillo y sus alrededores ¡Una maravilla!

9. Volver a mi querido Brasil

vuelta a rio de janeiro

¿Sabías que Brasil era uno de mis países favoritos? Este año, gracias a las Jornadas del V Centenario de la primera vuelta al mundo pude volver a mi Río del alma. No tuve mucho tiempo, pero el suficiente para visitar de nuevo rincones tan mágicos como el Cristo Redentor, con este funicular tan característico, Botafogo o las playas de Ipanema y Copacabana. ¡hasta me quemé en el ratito que pasee sobre el típico empedrado del paseo marítimo!

Lo que más disfruté de esta visita a Río fue subir al Cristo del Corcovado ¡sin nubes! ya que en mi anterior tournée brasileña, me tocó un tiempo poco apetecible, pero en esta me resarcí. Sólo me queda una pregunta ¿Para cuando la próxima?

8. Bien de carne por el barrio de Palermo, en Buenos Aires

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Como ya he comentado en la introducción, 2019 ha sido un año muy ‘foodie’. La carnaca que me comí en Buenos Aires es una de las muestras de ello. Este año fue mi tercera visita a la capital bonaerense, y cada año que voy, más a gusto me siento. Soy ya un palermitano de pro. Y como buen palermità, no puede faltar mi asado. Aunque, tengo que ser sincero, siempre se me hace difícil terminarlo, y eso que me pido el corte más pequeño que tienen siempre.

Un asado, un buen vino y unas copas por Palermo Soho siempre es bien.

7. Disfrutar de un aperol spritz en las plazas de Italia con la familia

puente de rialto venecia

Viajar con mi familia una vez al año se ha convertido en una tradición ya. En 2019 el destino elegido fue el norte de Italia, y aunque ver monumentos nos encanta, sentarnos, charlar y disfrutar de ratos de calidad nos gusta aún más. Mi madre y mi hermano descubrieron en Florencia el aperol spritz y se convirtió en nuestro momento de relax diario después de los largas pateadas monumentales.

A la orilla del río Arno en Florencia, en cualquier placita veneciana o a la sombra del duomo de Bolonia, estos ratos no tenían precio. De verdad.

6. Saborear los mil y un platos de la gastronomía coreana

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Kim chi, soju, juk, bossamabalone, tteok-galbijeon, yeonnibpap… pueden sonar bastante oscuro, pero en realidad forman una lista deinterminables delicias que pude saborear en Seúl, la capital de Corea del Sur. No conocía ninguno (o casi ninguno, alguno sí que lo conocía debido a que compartían nombre con drag queens de Rupaul’s Drag Race) pero a partir de ahora no los olvidaré. Sueño ya con volver a un restaurante coreano, aunque sea aquí en España. Eso sí (atención para navegantes), la cocina coreana es de esas de las que pican bastante, si no andas con cuidado, acabarás ‘enchilado’ como dicen en México.

No puedo ocultar el hecho de que, antes de ir, Seúl no me atraía nada, pero una vez allí, ¡no había quien me sacara de esta fascinante ciudad asiática!

5. …y de la gastronomía griega

gastronomia griega

¿Se puede pedir durante 15 días tzatziki en cada cena y comida? ¡Se puede! Mi panda y yo nos hicimos fanáticos de esta salsa típica griega durante nuestra gira por península e islas egeas. Pero no sólo el tzatziki nos enamoró: la ensalada griega, los pescados frescos, las carnes del interior, la taramosalata. Todo eso regado por magníficos vinos y buenas cervezas.

Grecia es definitivamente un destino de bon-vivants y hay que decir que, uno tiene que tener muy mala suerte para tener que encontrarse con un mal restaurante en todo el país. Estoy escribiendo estas líneas y me entra hambre sólo de pensar en lo bien que comí durante mi último viaje al país heleno.

4. Conocer el lado más alternativo de Lisboa

cafeteria o adamastor

La primera vez que fui a Lisboa corría el año 1988, pero no fue hasta este último año hasta que no descubrí la faceta más alternativa de la capital portuguesa. No sólo te hablo de la maravilla que han montado bajo el puente 25 de abril con el nombre de LX Factory. Te hablo de cenar como un rey en un palacio en Chiado, o de tomar una copa con las mejores vistas sobre el estuario del Tajo o de disfrutar de los vinos portugueses en increíbles bodegas.

Lisboa es una de mis ciudades favoritas del mundo y en 2019, reeditó su título y cualificaciones. Obrigado!

3. Perderme por castillos y pueblos de Transilvania

castillo de bran

Transilvania se ha cruzado en mi camino para quedarse. En febrero tuve la oportunidad de conocer esta fascinante región europea rodeada de mitos y leyendas. Además de ser una verdadera joya etnográfica dónde rumanos, húngaros székely y alemanes sajones conviven en paz, sus pueblos y ciudades se encuentran coronados por magníficos castillos recuerdo de su turbulento pasado.

Ir en coche por entre los agrestes Cárpatos y descubrir las fortificaciones fue sin duda una de mis mejores experiencias: Sighișoara, Brașov y Bran (el supuesto castillo que insipró a Bran Stocker en su archiconocida novela Drácula) son paradas imprescindibles para tu próxima visita a Rumanía. Volvería sin dudarlo, pero eso sí, en verano.

2. Santiago desde lo alto

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La capital de Chile me recordó a mi Granada: una urbe sobre un valle rodeada de altísimas montañas. Santiago fue en sí una gran experiencia: la comida genial, el centro histórico, más que genial, la gente, encantadora, y ver la estatua de Pedro de Valdivia, fundador de la ciudad que nació en mi pueblo de Extremadura, fue el colmo. Pero el momento más mágico de mi (corta) visita a Santiago de Chile fue la subida al Sky Costanera. 

En pleno corazón de «SanHattan», como es conocido el centro financiero de la capital sudamericana, el edificio de 300 metros de altura ofrece unas vistas espectaculares que dejan con la boca abierta. Espero poder volver pronto con más calma.

…algunas menciones de honor…

de fiesta por budapest

El año 2019 ha sido un año de tantos destinos y experiencias que me ha resultado difícil escoger sólo diez. Antes de contarte mi TOP 1, déjame que te resuma algunas menciones de honor. Por ejemplo: navegar de isla en isla por el Egeo, disfrutar de un maravilloso onsen tradicional en Tokio (en el cual yo era el único occidental), visitar la Acrópolis de Atenas (cuna de nuestra civilización), salir de fiesta por los espectáculos drag de Budapest, deslumbrarme con las luces de neón de Osaka, de ruta gastronómica por Montevideo

1. Stendhal con el atardecer de Meteora

meteora

Nada puede describir la belleza del paisaje de Meteora. Tampoco hay cámara que pueda captar la intensidad y profundidad del mismo. El atardecer en este paraje del centro de Grecia cuyo nombre significa ‘caído del cielo’, es una experiencia única. Los tonos ocres y anaranjados sobre los monasterios que cuelgan literalmente del cielo son para que te den un verdadero stendhal. Y nada mejor que hacer un picnic en la Sunset Rock para disfrutarlo con tranquilidad. Meteora fue una experiencia única de este año y, si me apuras, de la década.

¿Y las tuyas?

¿Cuáles han sido tus mejores experiencias de viaje en 2019?


Comments

  1. Pingback: Mi TOP 5 Viajes 2019 + Mi gran Viaje para 2020 – Asturiano por el Mundo

  2. Verónica Santamaría

    No puedes quejarte, ehh?? Has tenido un súper año lleno de experiencias. Ahora toca llenar el 2020 con muchas más, que estoy segurísima que lo harás!

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